viernes, 6 de diciembre de 2013

Las Hadas en el Jardín

El cielo parece vestirse de negro, con hermosas lentejuelas que traen tranquilidad, ahí en el jardín de hermosas flores se encuentra la chica que vino del bosque, la que de entre las aguas nació, la que con la naturaleza se vestía y con las aves cantaba, aquella que cambio su estilo de vida por la de una mortal, ahí se encuentra la hermosa y delicada criatura, tararea una bella melodía del bosque…
Con aquella hermosa voz, se levantan las flores nocturnas, encienden una delicada luz y revolotean a su alrededor pequeñas lucecitas, danzan con frágil elegancia las hadas que entre aquellas flores viven, escuchan el canto de aquella criatura de mística voz... danzan frágiles y hermosas, ella se siente como en casa, advierte que no está tan sola como creía, pero aquellas mariposas con porte de pequeñas mujercitas solo pretenden advertirle que la Valkyria conoce su ubicación, y ella, la Ninfa; sin preocupación alguna y haciendo caso omiso baila al ritmo de su hermosa canción, se mece en el aire dejando que éste, acaricie su larga y negra cabellera, aquel suspiro que la vio nacer, aquel que le dio la vida, canta con los ecos de las ninfas del cielo, aquellas que viven en la volátil esencia, aquellas que nadie más puede ver y se hunde en una sinfonía sin fin.

Canto de música eterna que entre la briza del viento se mezcla y en la obscuridad de la noche se estremece…

viernes, 29 de noviembre de 2013

La Ira de La Valkyria

Galopando a toda prisa llegaban las Valkyrias y los Centauros, llegando al borde de su mundo en el lado norte, en medio del valle de los centinelas de fuego buscaban a la Valkyria que cabalga en el corcel de las sombras y cuando al fin la encuentran le explican lo sucedido.
Enfurecida, llena de rabia, maldiciendo a Mística que la ha engañado, va cabalgando la mujer de las pesadillas, va a toda prisa rumbo a la aldea del sur en donde se encuentra la Ninfa, va a descubrirla, la castigara, la asesinara si es necesario, pero no puede permitir que ella siga con los humanos, piensa que debe matar a Mística; sin embargo sabe que no puede hacerlo, pues ella es la encargada de proteger el equilibrio de su mundo, ¿Por qué los espíritus de la naturaleza le habrán dado tanto poder? ¿Por qué ella puede hacer lo que le venga en gana?
Ella cree que debería estar limitada en cuanto a poder se refiere, espera por lo menos poder darle un escarmiento.
Allá va, la mujer encargada de proteger a los seres mágicos de las terribles intenciones de los humanos; cabalga tan rápido como puede, sabe que podrá descubrirla y sabe que puede usar la ventaja que ella tiene al confundirse con los humanos, después de todo ser mitad humana no es tan malo como parece.
Mientras cabalga se pregunta ¿Por qué la Ninfa ha ido en busca de los humanos?, sabe que ha sido por un hombre, pero no entiende cual es la razón, de todos los seres que existen en el mundo mágico las ninfas acuáticas son las que menos sentimientos tienen después de los gnomos y las hadas, por lo general las ninfas solo esperan ser poseídas por algún macho de cualquier otra especie: un centauro, un fauno, un elfo, un tritón, y las más desesperadas por un troll, pero ninguna podría ser poseída por un humano, es la primera vez que se sabe que una ninfa tiene interés por un humano. No alcanza a comprender como es que una ninfa tiene la osadía de querer vivir entre los humanos, las criaturas más osadas son las hadas que atraídas por los hermosos jardines de las casa viven entre las flores, lo gnomos que golosos hurgan entre los dulce alimentos de los hombres y las sirenas que no tienen mucha elección cuando los marinos zarpan a pescar, pero las ninfas… ellas por lo general prefieren permanecer ocultas, prefieren ser deseadas por aquellos macho que las cortejan constantemente.

Sí allá va la Domina, la Valkyria Humana esperando poder salvar y castigar a la traidora que está a punto de exponer a su mundo.

viernes, 15 de noviembre de 2013

UN NUEVO PREMIO PARA LA NINFA



Me siento muy afortunada por seguir recibiendo hermosos premios, a pesar de los pocos lectores que tengo (o que creo tener) a si pues quiero agradecer a LUNA Y NEREA por haberme dado este premio.

¿De qué se trata?
Es un premio en cadena, para impulsar y promocionar pequeños blogs que están empezando a ser buenos pero que la gente todavía no los ha visto. Una vez te conceden el premio, tú debes dárselo a otros blogs y responder a unas preguntas que te deja aquel que te ha concedido el premio.


Aquí dejo las reglas:
-Nombrar y agradecer el premio a la persona que te lo concedió y estar suscrito. (Ya Hecho al Principio de la entrada)

-Responder a las once preguntas de la persona que te concedió el premio. Que son las siguientes:

1. ¿Cuál es el "éxito" de tu blog (o página web)? 
No estoy muy segura de que mi blog tenga un éxito tan grandioso, pero debo decir que me siento muy feliz porque aunque no parezca ser el blog más popular del mundo he recibido comentarios muy lindos por parte de quienes me leen.

2. ¿Lo tienes meramente por entretenimiento o con alguna finalidad?
Creo que básicamente era entretenimiento, pero con el tiempo me he dado cuenta de que quienes me leen piden un poco más de mi como escritora y eso me ha impulsado a seguir de manera un tanto más apasionada este arte que es la escritura.

3. ¿Cuántas veces a la semana publicas y a que horas?
Pues creo que soy una persona un tanto inestable en ese aspecto, a veces publico hasta tres veces a la semana y otras... bueno pueden pasar semanas sin que publique nada.

4. ¿El blog te ha generado alguna anécdota que quieras y puedas compartir?
Creo que es mas bien al revés, yo genero las anécdotas y el blog es el lugar donde las publico 

5. ¿Cuál es tu post preferido?
Creo que nada se compara con el primer post que publique, fue como encontrar a una parte de mi no conocía, como haber creado un sueño que si se puede, ver y escuchar, incluso degustar y tocar. Creo que eso me hizo sentir muy bien y por eso creo que ese sería mi post preferido.

6. ¿Cuál es tu red social favorita?
Generalmente no suelo pasar tanto tiempo en la computadora o con cualquier otro tipo de tecnología moderna por lo que no tengo una favorita (creo que aun vivo en la era de piedra jaja)

7. ¿Has participado o participas escribiendo en otro blog?
No en conjunto, pero si escribo otra blog-novela que pueden seguir a través de este enlace: Entre Sombras

8. ¿Qué te gusta hacer en tus momentos off-line?
Bueno soy estudiante de canto así que es lógico que me guste cantar, también me gusta leer o escuchar música clásica. Me gusta salir a caminar por el bosque (ya que esta cerca de mi casa), es un lugar místico, me hace sentir como en mi historia Ninfa Celtica.

 9. ¿Podrías describir un momento idílico o tu cita ideal?
Creo que solo quiero que sean originales conmigo y no predecibles, eso me aburre, creo que por eso escapo a crear mi mundo de seres mágicos.

10. ¿Se sabe en tu entorno de la "vida real" que tienes este blog?
Solo lo sabe mi mejor amiga y un amigo de la escuela.

11. ¿A quién te gustaría agradecer tu premio (fans, amigos, famillia, o alguien especial)?
Pues creo que me gustaría agradecer a las dos chicas que me lo otorgaron Luna y Nerea y a todos mis lectores por ser tan lindos y atentos conmigo y con la Ninfa así como con Leonora.

-Conceder el premio a once blogs distintos que te gusten, que estén empezando o que tengan menos de 200 seguidores.
Yo solo se lo di a tres porque el resto de lo blogs que me gutan tienen más de 200 seguidores así que... estos son los que yo elegí

Gritos inconscientes

Camilla Mora

Mors in Amore



-Informar del premio a cada uno de los premiados.
-No mandar el premio al blog que te lo concedió, para no romper la cadena.

Y eso es todo.

jueves, 7 de noviembre de 2013

En la Aldea: Los dos Hombres que la Intrigan

A las afueras del palacio ella va... camina entre la gente preguntándose como escapar de las intenciones del Rey, ¿Será bueno decirle a la Reina? ¿O será mejor callar y evitar todo contacto con el Rey?
Sin darse cuenta sus pensamientos se vieron abrumados por la dulce y delicada voz de su amiga de cabellos dorados.
– ¡Céltica! –Exclamo Mérida –ven quiero presentarte a unos amigos.
La delicada muchacha siguió a su amiga mientras, olvidando por un segundo lo que había pasado con el Rey, de repente se vio envuelta en una angustia y en una incertidumbre que parecían irreales, cuando llegaron a donde se encontraban los amigos de Mérida, la Ninfa se percató de que entre estos hombres se encontraban los dos que la intrigaban de manera muy distinta.
–Ellos son amigos de su alteza; El Príncipe, son caballeros nobles o al menos es como él los considera ya que no tienen el titulo como tal, pero son los pocos amigos del Príncipe que no son unos “Don Juan” –dijo Mérida un tanto emocionada.
Mientras tanto la Ninfa no podía escuchar del todo lo que su amiga decía, estaba abrumada por las emociones encontradas sentía en esos momentos alcanzo a escuchar que su amiga le presentaba a dos o tres hombres que para ella eran un tanto irrelevantes hasta que…
–Céltica, él es Edward uno de los caballeros más nobles que conozco y el de alta confianza – dijo Mérida.
–Hola dijo la damisela –viendo que el hombre que tenía frente a ella era aquel al que había ido a buscar.
–Hola, es un placer conocerte –respondió el apuesto caballero.
Era un torbellino de emociones para ella, al fin tenía el placer de conocerlo, al fin sabía cuál era su nombre y al fin había podido haberle; sin embargo no le duro mucho el gusto cuando su amiga dijo.
–Él es Declan, la mano derecha del Príncipe.
Esté era el hombre al que ella temía de alguna manera, pues no sabía de qué se trataba, se sentía acorralada y aprisionada cuando lo miraba por lo que se limitó a decir un “hola” casi inaudible.
–Es todo un honor conocer a la encantadora doncella de la voz más hermosa que he escuchado –dijo el gallardo caballero con una voz que a ella le resulto estridente.
Celtica se sonrojo un poco y titubeo antes de agradecer los halagos de aquel caballero, parecía un joven amable pero no estaba segura de confiar en él.

Así pasaron la tarde las dos damiselas, con aquellos hombres que resultaron ser muy agradables para Celtica, en especial Edward, el hombre con quien había soñado hace tantas lunas.

jueves, 31 de octubre de 2013

Seducción ¿El Rey?

La corte parecía un lugar que se encontraba a orillas del olvido, desolado estaba aquel inmenso castillo, parecía el hogar de las almas en pena; aquella pobre damisela que llego desde el corazón del bosque, la que nació de entre las aguas se encontraba un tanto abrumada… solitaria por los enormes pasillos de aquel castillo, caminaba pensativa, confundida… al fin el hombre que ha venido a buscar ha aparecido, al fin lo ha encontrado, no ha tenido oportunidad de estar cerca de él, mucho menos de hablarle, pero sabe que lo ha encontrado; sin embargo se siente un poco aterrada… el otro hombre que parecía vigilarla en la aldea también está en su mente, se encontraba junto al hombre al que ella con tanto anhelo ha buscado, no sabe de qué se trata todo esto, solo sabe que hay un hombre al que ella quiere conocer y otro que parece estar de por medio como si fuese alguna clase de inconveniente…
Distraída y abrumada, sus pensamientos se ven interrumpidos por una voz...
–Hola querida – se oye decir al Rey que está justo frente a ella.
–Su majestad –responde con respeto y delicadeza la hermosa chica.
–Sabes que eres muy hermosa, ¿verdad? Y supongo que sabes lo que quiero.
–A decir verdad no se de que me habla su alteza –responde segura la Ninfa
–Pues ¿Por qué no vienes conmigo para que te enteres? –propuso con desdén el Rey
–No estoy interesada en sus halagos alteza, yo sirvo a la casa de la Reina y no voy a faltarle al respeto a la mujer que me ha dado un lugar especial en su corte –contesto a la defensiva la hermosa chica de las aguas.
–Como quieras, solo digo que conmigo puedes tener otro tipo de privilegios que jamás tendrás en la casa de mi esposa –replico el Rey ofendido
–Pues mi decisión es quedarme en donde estoy –volvió a decir la Ninfa y haciendo una humilde reverencia se marcho.

Aun no podía creer que el Rey tuviera la osadía de querer poseerla como si fuese de su propiedad, así que decidió salir del palacio y pasear por la aldea.

sábado, 26 de octubre de 2013

La curiosidad de Mérida

La mañana era hermosa, el sol brillaba con luz suave y cálida, las aves cantaban junto a la ventana de Celtica, era como si éstas supieran quien era ella, no era para menos, las aves reconocen el canto del bosque en cualquier lado que lo encuentren; pero no es para preocuparse, por mucho que los animales vivan junto a los seres mágicos, estos no pueden más que sentirse a gusto con ellos. Segura esta de que esos hermosos pájaros no la delataran.
Alguien llamaba a la puerta, era la mujer de cabellos dorados, aquella que encontró a la chica del bosque en la playa; Mérida.
–Y bien… ¿Cómo te fue anoche?... estabas muy entretenida con el Príncipe, acaso ¿hay algo que quieras contarme?
–Pues es un hombre muy agradable –contesto Celtica con toda naturalidad.
– ¿Solo eso? –Pregunto su amiga un tanto desilusionada – ¿No crees que es guapo, o interesante, o al menos lindo?... dime que es lindo.
–Pues es muy agradable y muy caballeroso, no he conocido muchos hombres así –volvió a responder la Ninfa.
–Pues él parecía estar muy interesado en ti, no quería bailar con nadie más que no fueras tú y que se fugaran al jardín después… eso fue tan romántico –menciono Mérida con un brillo singular en los ojos –creo que ahí puede haber algo más.
– ¿Algo más? –Pregunto extrañada la frágil e ingenua chica del agua y el viento –No entiendo… además ¿cómo podría el estar interesado en mí? no parecía mirarme como a una presa y él solo quería bailar conmigo para alejar a las otras chicas que vinieron solo para bailar con él.
Soltó una carcajada Mérida un tanto extraña, misma a la que reprimió segundos después porque era una dama.
– ¿Cómo es que no lo entiendes?, el Príncipe muy probablemente este enamorado de ti y tu no lo sabes, ¿Qué jamás te has enamorado?...
– ¿Qué se siente amar a alguien? –Pensó Celtica en voz alta para sí misma.
– ¿De verdad no lo sabes? –Pregunto Mérida extrañada –creo que es mejor que me valla.

Y saliendo de la habitación, Mérida se preguntaba ¿Cómo era posible que su amiga no entendiera nada del amor? eso era completamente extraño, no era normal y con ello crecía más la duda de quién era realmente aquella mujer de singular belleza.

jueves, 17 de octubre de 2013

Sirena: El regreso al bosque

Nadaba tan rápido como podía, nadaba río arriba evitando a los peces, a los tritones y a las sirenas que se cruzaban en su camino, nadaba a prisa, llevaba un importante mensaje, estaba asustada y enojada, se sentía impotente; la mujer con la aleta de pez buscaba llegar al claro del bosque donde solía vivir, enfadada de no haber logrado derribar al barco que llevaba a la Ninfa, frustrada por no haber ganado el corazón de aquel macho con cuerpo de gladiador y patas de corcel veloz, preocupada por sus compañeros del bosque, aterrada de que nuevamente pasara una masacre en el mar, pero confiada en que Domina lo solucionaría.
Llegó la chica de agua salada y agua dulce a la orilla de aquel lugar donde sentía celos de la mujer de las dos piernas y al lugar donde podía admirar la galante figura de aquel macho a quien amaba sin ser correspondida, llegó la Sirena a ese lugar preguntando desesperadamente por la Valkyria Humana, sin tener respuesta alguna, la ninfas aterradas por su desesperación se preguntaban qué había sucedido, los elfos intrigados por su obsesión se preguntaban lo mismo, las hadas inocentes se sentían extrañadas, los faunos lujuriosos esperaban poder pescarla, los centauros enfurecidos se veían seducidos, y las valkyrias solo escuchaban.

La traición de la Ninfa había llegado hasta el bosque a través de la palabra de la mujer acuática, en marcha se puso un ejército de centauros y valkyrias, en marcha a buscar a Domina y a Pesadilla, en marcha con dirección al norte, en marcha maldiciendo a la Ninfa de bella voz y la mujer que todo lo puede, la que se transforma y místicamente ayuda a todo el que ella considera de virtudes puras… allá van en sus corceles, allá van los machos mitad corcel… ¡Traed a la Valkyria Humana, traedla ya!

viernes, 4 de octubre de 2013

La pálida noche en el jardín (Henry: el Príncipe)

La noche era hermosa, el cielo estaba lleno de estrellas y en aquel jardín Celtica podía respirar un poco del aire del bosque, sentía como la suave brisa bañaba su rostro y más viva no podía sentirse en aquel preciso momento, se había olvidado por completo en aquel instante de aquel hombre al que ella buscaba y esperaba y de aquel del que huía y hasta temía… Era la primera vez que lidiaba con un macho, un hombre… que no intentaba ni atacarla, ni poseerla, era la primera vez que se sentía segura y a salvo, miro al Príncipe y sonrió de manera dulce e inocente, él le devolvió la sonrisa y al fin rompió el silencio.
–Y… ¿Cómo dices que te llamas?
–Celtica…
–Extraño y hermoso nombre, yo soy Henry
–También es un nombre extraño… o al menos lo es de dónde vengo, pero creo que también es hermoso
–Gracias Celtica, debo decir que tienes una hermosa voz, cualquiera diría que está escuchando a las ninfas del bosque…
¡¿Ninfas?! eso hizo que Celtica se sintiera acorralada, desprotegida por un momento pensó que la poción de Mística había dejado de hacer efecto, se sintió vulnerable y pensó en escapar, cuando escucho a Henry decir…
– ¿Por qué esa mueca? solo dije ninfas, ¿Jamás has escuchado ese tipo de mitos?
– ¿Mitos? –Dijo más tranquila la Ninfa –Claro, es solo que me desconcertó que dijeras eso, pero ¿Tú no crees en esas cosas o sí?
–Bueno no en todos, pero si en varios… cuando salgo lejos me he topado con algunos dragones y por eso creo en ellos, pero las hadas, las ninfas y los duendes… bueno no estoy seguro; tal vez te enseñe la galería de pinturas que tenemos sobre los seres mágicos que tenemos en el castillo.
–Eso sería muy interesante.
–Sí que lo es, bueno lo mejor será que subas a descansar y platicaremos en la mañana, yo me encargo de ahuyentar a las señoritas que no quiero.

Y diciendo esto aquel hombre sublime, le dio un beso en la mejilla a su nueva amiga.

jueves, 19 de septiembre de 2013

II PREMIOS EL CLUB DE LAS ESCRITORAS




A todos mis lectores, a los que son fieles y los que no lo son tanto les quiero compartir que me he inscrito al concurso que organiza el club al que pertenezco EL CLUB DE LAS ESCRITORAS y me he inscrito en las categorías de:

PREMIO A LA MEJOR HISTORIA

PREMIO AL MEJOR DISEÑO

PREMIO AL MEJOR ESCRITOR/A

Esperando que las cosas salgan bien, conoceremos los resultados durante el mes de Octubre, para conocer las bases de dicho concurso pueden hacer clic aquí

La Ninfa Celtica les agradece que estén al pendiente del bosque y que lean sus historias.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Bailando con el Príncipe

Un ciclo sin fin es el que ella está viviendo, atormentada y aterrada, intenta no ver a aquellos hombres, intenta no pensar en la relación que ellos puedan tener, quiere escapar y al mismo tiempo le quiere hablar… termina la canción y se ve interrumpida por el Rey…
–A llegado la hora de bailar –dice éste haciendo una señal a la ninfa de que puede descansar.
La música comienza en los bellos instrumentos de los músicos de la corte, cada caballero invita a cada doncella a bailar, cada doncella, cada princesa, condesa o duquesa, espera ser la elegida del Príncipe como su compañera de baile…
Ella que tímida es, espera ser invitada por aquel al que vino a buscar y se pregunta si el desea hacerlo, mira en dirección hacia él pero no deja de sentirse incomoda por aquel otro hombre que silencioso la vigila, solo espera que éste no sea quien quiera bailar con ella…
Sus pensamientos se ven interrumpidos por una agradable voz masculina, es el Príncipe quien amablemente le pide que bailen, ella casi sin palabras acepta y comienzan a bailar, todos están sorprendidos, aquella chica no solo es una excelente cantante, también es una exquisita bailarina. La reina sin duda piensa que hizo una gran elección y cree que las sospechas de Mérida pueden ser ciertas, Mérida está orgullosa de su amiga, el Rey se ve seducido por aquella mujer que no tiene la mínima intención de hacerlo, y el resto de las doncellas parece odiar a aquella hermosa mujer que sin intentarlo ha conseguido ser la elegida del Príncipe.
Aquel caballero a quien ella vino a buscar se levanta y pide a otra doncella bailar, ella lo mira desconcertada, pero ¿Qué puede pensar en una situación así alguien que viene del bosque y no comprende las relaciones humanas? en fin se limita a tratar de disfrutar la compañía de su alteza real el Príncipe.
El otro caballero, el que parece vigilarla, se encuentra sentado cerca de la mesa real, la observa, la sigue con la mirada allá donde ella danza, no parece parpadear y no parece querer perderse un solo detalle de lo que hace aquella chica, asustada tropieza y se ve recobrada con la dulce y gallarda voz de su compañero.
– ¿Está todo en orden mi lady? –pregunta un tanto desconcertado el Príncipe.
–Sí, –contesta la damisela –es solo que me siento un tanto abrumada–.
–Y… ¿Se puede saber por qué? –volvió a preguntar el varonil caballero.
–Es solo que no entiendo como alguien como usted puede invitarme a bailar, siendo yo una plebeya –se apresuró a contestar la ninfa.
–Yo no estaría tan seguro –dijo aquel hombre –he oído que no tienes muchos recuerdos desde el accidente en el barco en que venias bordo, además independientemente de ello yo solo quiero evitar bailar con las otras chicas, no pretendo conquistarte.
–Y, ¿Por qué las evita?
–Bueno, mis padres esperan que consiga esposa en esto días y la verdad no tengo intensiones de hacerlo, esa es la razón por la que todas ellas viene a este palacio, tú te has presentado como una plebeya y no hay manera de que entre tú y yo haya algo, además aunque fueras de la realeza solo me interesarías como una amiga y no como algo más.
–Entonces ¿Yo soy como su señuelo?
–Algo parecido… pero basta de hablarme de usted, sé que soy de una clase distinta a la tuya, o al menos eso parece pero no eres tan joven y yo no soy tan viejo como para que tengas ese tipo de formalidades conmigo, si vamos a vivir en el mismo palacio y vamos a ser buenos amigos… creo que debemos tenernos un poco más de confianza no te parece
–Tal vez…
–Ahora porque no salimos de aquí y vamos a charlar un poco al jardín, debe ser sofocante para alguien que ha cantado casi toda la noche seguir aquí.

Y diciendo esto salieron los dos del enorme salón de baile donde estaban las mujeres celosas y los dos caballeros que la intrigaban.

jueves, 5 de septiembre de 2013

El Gran Banquete: Dos Encuentros Inesperados

Cantaba la hermosa doncella, su hermosa voz inundaba el vacío de aquel salón, lograba mantener a los invitados callados, disfrutando de aquel banquete en honor del Príncipe, disfrutando de tan hermosa música… Ahí, canta la hermosa doncella, la hija del bosque, canta con dulzura, con delicadeza y con pasión.

Mira hacia la mesa de los amigos del Príncipe y lo que ve la deja casi sin voz para seguir cantando…

Ahí entre los invitados del Príncipe está aquel caballero, aquel hombre que viene a buscar, al fin lo ha encontrado, ahí entre aquellos que disfrutan de los exquisitos manjares del palacio, ahí está el hombre, el macho, el varón, el caballero, el guerrero por quien ha arriesgado su vida en más de una ocasión y justo a su derecha… oh ¿desilusión?, ¿confusión?, ¿desesperación?, junto a aquel hombre que la intriga, esta aquel caballero que apenas unos días en la aldea la intimidaba, está ahí el otro hombre que parecía vigilarla, que parecía cazarla… confundida, ilusionada, aterrada, emocionada, asustada… ahí… está cantando la hermosa chica que no puede evitar sentirse insegura y al mismo tiempo esperanzada, canta sin cesar, canta casi sin aliento, se asfixia en cada respirar, se ahoga en su propio canto y vuelve a comenzar…

viernes, 30 de agosto de 2013

El Gran Banquete (El Príncipe)


Mérida llamo a la puerta en la recamara de su amiga la Ninfa, aunque ella no sabía su verdadera identidad, segura estaba de que aquella delicada chica era diferente, sabía que no recordaba mucho desde aquel accidente en el mar, pero tenía razones incluso para creer que Céltica pertenecía a la realeza, ¿sería una princesa, una condesa o tal vez una duquesa?
No sabía porque pero tenía esa sensación, incluso pensaba que tal vez ella sería la afortunada de ser la esposa del príncipe y posteriormente se convertiría en Reina.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando Céltica abrió la puerta. Lo que vio la dejo tan asombrada que termino por confirmar sus sospechas… (Que ingenua al creer eso de alguien que es hija del viento y del agua). Céltica vestía un hermoso vestido azul y no usaba más que un par de joyas que adornaban de manera sutil su negra cabellera; así las dos jóvenes se dirigieron al gran salón donde sería la fiesta.
Al entrar en aquel salón, la mujer del bosque pudo observar una bella iluminación en todo el lugar, fue hasta el lugar que le correspondía en la corte y se dispuso a esperar la orden del Rey para comenzar a cantar. En ese instante vio que los dos portones se abrían de par en par anunciando la llegada de su alteza el Príncipe.

El Príncipe era un hombre apuesto y elegante, reflejaba virilidad y valentía, pero para Céltica solo era un hombre más, no era a quien ella buscaba; Sí, tenía una hermosa sonrisa y un noble carácter, pero no era de su interés, miro al Rey y él le indico que comenzara a cantar, así los madrigalistas de la corte comenzaron a tocar y ella con su hermosa voz comenzó a cantar. Todos en la sala estaban maravillados de tan talentosa mujer, creían escuchar a los mismos ángeles cantar, en especial el Príncipe que no paraba de mirarla, no como lo  hacían los otros hombres de la corte, la miraba de una manera especial, no era de amor, tampoco de deseo, la miraba como a la persona más interesante de toda la corte, en ningún momento la vio con lujuria sino con cariño y delicadeza, pensaba en que tal vez ella era la mujer menos interesada en él a diferencia de el resto de las princesas y duquesas que venían de muy lejos solo para probar su suerte con aquel caballero, sabía que ella podría ser su escape de el resto de las chicas, puesto que aunque sus padres insistían en que escogiera a una princesa por esposa cuanto antes, él aun no se sentía preparado para ello. 
Así Céltica logro impresionar a cada uno de los invitados, y mientras cantaba observaba en la cara de los hombres, fijo su mirada en la mesa de los caballeros y amigos del Príncipe y lo que vio la dejo casi sin voz para continuar…

martes, 6 de agosto de 2013

Mística: La Voz del Pasado

Se encontraba la chica del bosque sola en su habitación, mirando a través de la ventana, ahí en la distancia; más allá de los muros de los muros del castillo, más allá de los límites de la aldea… allá en donde los arboles crecen, pensaba en todo lo que en ese preciso instante estaría pasando, ahí donde ella solía vivir.
Una cálida melodía invadió toda la habitación, reconocía cada nota sublime que se escuchaba en el cuarto, era como si una suave y delicada brisa entrara por la ventana, y justo ahí estaba, su amiga, su protectora...
Mística apareció junto a las suaves cortinas de seda que cubrían con su belleza la habitación.
– ¿Te encuentras bien? –Pregunto Mística a su amiga –Pareces algo confundida, ¿Qué ocurre? –.
– Es solo que ya no estoy tan segura de hacer lo correcto, tal vez debería retirarme, regresar a mi lugar, ¿Qué pasara si me equivoco? ¿Y si no es lo que quiero?, estoy asustada y me siento sola ­–contesto la Ninfa.
– Pero esa fue tu decisión, yo no puedo interferir en tus decisiones y tampoco puedo tomarlas por ti, pero creo que ya has llegado lejos como para mirar atrás y volver ¿No te parece? –dijo al fin la chica de las melodías sublimes.
– Tal vez tengas razón, pero ¿Qué pasara si lo arruino? ¿Qué pasara si por mi culpa se desata una guerra entre nuestros mundos?, comienzo a creer que Domina realmente trababa de ayudarme –.
– No pienses en eso, Domina es una mujer que ha guardado mucho rencor después de la muerte de su madre, además no sería la primera vez que se desata una guerra entre nuestros mundos –.
– ¿De qué hablas? –Pregunto con curiosidad Céltica.
– Bueno, se supone que debo de contarle esto a nadie pero creo que puedo confiar en ti… ya ha habido por lo menos tres guerras entre nuestros mundos, la primera fue hace mucho tiempo cuando ellos se enteraron de nuestra existencia y nosotros de la de ellos, un hombre se enamoró de una sirena; la capturo mientras estaba de pesca y la aprisiono en su barco, la ira de Tritón desato una enorme tormenta en el mar y el marinero murió, la sirena que con el tiempo se había enamorado de él enfureció y con la ayuda de una hechicera del bosque de las tinieblas cambio su preciada aleta por un par de piernas, ella revelo su secreto a los humanos y una masacre de sirenas se desato sin piedad alguna sobre las hijas del mar. La siguiente guerra se desato cuando un Fauno preso de la belleza de la hija del entonces Rey decidió llevarla consigo al bosque y la rapto contra su voluntad, el Rey ordeno que se matara al sátiro; que se quemara el bosque si era necesario, y aunque los centauros y dragones fueron grandes guerreros en la batalla, muchas hadas y gnomos murieron, el fauno que aterrado estaba de sus acciones mato a  su amada y después se suicidó. Después la caza de dragones se volvió un deporte para los humanos y finalmente la tercera guerra llego, un hombre y una valkyria contrajeron matrimonio y tuvieron una hija de nombre Domina, él descubrió que ella era una valkyria y la entrego a la inquisición, la valkyria fue quemada como bruja y Domina fue rescatada por las otras valkyrias del bosque, así fue criada por Augusto y Deyanira, los hechiceros del bosque –.
– ¿Y se supone que eso me hará sentir mejor? –Pregunto la Ninfa un tanto molesta.
– No, solo digo que ya no estamos tan escondidos ni somos del todo un mito para ellos, aunque muchos de los humanos y muchas de las criaturas mágicas intenten negarlo –.
– Entonces, ¿Me estás diciendo que debo continuar? –.
– No quiero responder a esa pregunta, pero si es una sugerencia –contesto al fin Mística, y sin más nada que decir desaprecio entre su bella música.

martes, 30 de julio de 2013

El Rey: La Advertencia de Mérida

Ordeno la Reina a su fiel dama de compañía que llevara a sus nuevas damas a la casa de la Reina y que les diera las respectivas instrucciones de lo que debían hacer. Así lo hizo la doncella de cabellos dorados, y al estar a solas con su amiga Céltica le advirtió sobre los deseos del Rey.
— Debes saber que su alteza el Rey, no es la clase de hombre que parece, como la mayoría de los hombres en este lugar, él tiende a ser victima de sus deseos carnales y hará cualquier cosa para tener la oportunidad de que estén a solas,  ¡No se la des!, nosotras debemos nuestros votos de castidad a la Reina, podemos salir con algún muchacho, pero no podemos estar a completamente a solas con ningún hombre; o eso puede causar nuestro despido, si tenemos cualquier intención de vivir con algún joven apuesto, es nuestro deber avisarle a la Reina para que ella lo apruebe y consiga nuestro remplazo, de lo contrario puede costarnos incluso la vida —.
— ¿Quieres decir que no debo ver al Rey incluso si el me lo pide como una orden? —.
— Él no puede darte ordenes, ya que tu sirves a  la casa de la Reina, sé que él te nombro la cantante de toda la corte, pero antes tienes un deber con la Reina, por lo que si intenta sacar provecho de ello no obedezcas sus ordenes, aun si te despide; solo sera de tu puesto en la corte más no en la casa de la Reina, de ahí en fuera todo el día es para nosotras, para ir a la aldea o incluso al bosque o a la playa, siempre y cuando estés puntual y elegante a la hora de descanso de la Reina por las tardes, claro que por hoy debes estar aquí el resto del día, todos tenemos que prepararnos para el regreso del Príncipe—.
— ¿El Príncipe? — pregunto Céltica — ¿Él también es como el Rey? — quiso saber.
— Bueno, hasta ahora se ha mostrado respetuoso con las damas de la corte, ninguna se ha quejado de él y parece ser un gran caballero, no creo que tengas porque preocuparte, ahora vístete, arréglate y prepárate, hoy cantaras para muchas personas... ¡Ah! se me olvidaba, cuídate de algunos de los amigos del Príncipe, tienden a parecerse al Rey —.
Se quedo sola en la habitación que su amiga le había asignado y se preguntaba si encontraría al hombre que ella buscaba, pensaba en todo lo que había pasado para llegar hasta ese punto. Mientras veía los hermosos vestidos que tenia en su armario se daba cuenta de eso no la representaba, se miraba al espejo y podía ver que no era ella, se extrañaba a si misma y pensaba en si estaba o no haciendo lo correcto, tenía muchas dudas sobre lo que a partir de ahora pasaría, extrañaba el canto del río en donde vivía, extrañaba respirar entre los inmensos arboles, extrañaba incluso el insipiente canto de las sirenas y el estruendoso y molesto galopar de los centauros, a medida de que pasaban los días extrañaba su mundo, extrañaba su hogar... ¿Tal vez debería regresar?

jueves, 25 de julio de 2013

Sus Majestades: La audición de Céltica frente al Rey y la Reina

Caminaban las doncellas en compañía de Mérida la busca-talentos de la corte, llevaba en su mano una lista que contenía los nombres y talentos u oficios de las cinco doncellas que iban de tras suyo... caminaban con elegancia en dirección a los tronos; dos bailarinas, una mucama, una costurera y una cantante. Todas esperaban ser presentadas a la Reina y ser seleccionadas para permanecer en el palacio, de lo contrario tendrían que retirarse y buscar empleo por su cuenta en alguna casa de nobles o bien en los burdeles del reino.
Céltica miraba con atención todo lo que la rodeaba, las cortinas, los muebles, los pisos y los enormes candelabros que colgaban de los techos; enseguida escucho a un hombre que anunciaba la entrada de los dos comarcas a la sala, primero entro el Rey, era un hombre alto y apuesto; caminaba erguido y con actitud imponente, tenia una mirada que podía seducir a cualquier chica que el quisiera, parecía tener un carácter noble, pero era bien sabido que nadie se atrevía a desafiar su autoridad y sus decisiones porque era lo ultimo que el osado hiciera.
Luego estaba la Reina... Mujer de singular belleza, ojos azules y cabellos rojizos, vestida con finas telas que resaltaban su porte femenino, de piel blanca y de perfectas proporciones. Con una voz dulce y cariñosa como la de una madre bondadosa.

Las cinco doncellas fueron presentadas a los dos soberanos y cada una fue examinanda minuciosamente por ambos mandatarios, claro que cada uno examinaba diferentes cosas: el Rey por ejemplo: solo veía el cuerpo de cada una de ellas, si tenían talento o no; no era de su incumbencia solo buscaba que fueran hermosas y que pudiesen cumplir sus caprichos mundanos; por otro lado, la reina buscaba que fueran talentosas y de una belleza digna de la corte, que no fueran lo bastante osadas para acercarse a su esposo ni a su hijo; pues después de todo por muy hermosas que fueran... eran plebeyas. 
En todo el reino se sabía que la Reina tenía a las chicas más bellas y talentosas de todo el reino, sino es que de todo el mundo y el Rey, tenía a las que la reina no admitía o bien a las que su esposa desechaba cuando ésta las remplazaba o despedía.

Llegó el momento de que las hermosas chicas hicieran su presentación a los reyes, primero paso la costurera que impresiono a la reina con los exquisitos diseños de sus elegantes y refinados vestidos, hilados con con estambres de oro y adornados con las más deliciosas joyas, por lo que la reina la acepto en su casa sin pensarlo mucho, después la primer bailarina fue rechazada por su torpeza, además de que al bailar coqueteaba con el Rey por o que a la Reina le pareció un descaro y aunque su esposo también la rechazo a pesar de sentirse interesado por ella; (la Reina sabía que su esposo le era infiel con las doncellas que el escogía pero se mantenía ingenua ante la presencia de los demás, incluso había despedido a muchas de sus doncellas luego de traicionar su confianza al acostarse con su esposo). Posteriormente la mucama ofreció amablemente sus servicios a la Reina pero esta la rechazo porque no le parecía lo eficiente, pero el Rey dijo que podía quedarse y le abrió las puertas de la casa del Rey. La siguiente bailarina también fue rechazada ya que la bailarina que ahora entretenía sus tardes soleadas venía desde Rusia y era la mujer más talentosa de su país, por lo que la Reina no necesitaba a otra bailarina en su casa de damas de compañía; sin embargo el ambicioso y lujurioso Macho Real la recibió con mucho gusto en su casa.
Finalmente Céltica que se sentía nerviosa pudo sentir como el Rey clavaba su hostil mirada en ella, mientras que la Reina la veía con la duda en su mente de como era que una chica tan delgada y frágil pudiese cantar; en tanto la delicada chica del bosque pidió al clavesinista que tocara su música... Apenas abrió la boca la Ninfa, el salón se lleno de su hermosa voz, su canto llenaba cada rincón de la sala, incluso de habitaciones contiguas que hasta algunos de los sirvientes se quedaron atónitos con tan bella música; la Reina estaba completamente impresionada que no dudo en remplazar a su antigua cantante y la acepto en la casa real de la Reina. 
El Rey también estaba impresionado que al terminar su canto la bella chica, la felicito y declaro que sería no solo la cantante de la Reina, sino que sería la cantante de la corte entera y así proclamo que esa misma noche ella debía cantar en el gran banquete que se celebraría por el regreso de su hijo, el Príncipe al palacio, luego de una guerra de cruzadas, quería impresionar a todos sus amigos e invitados con la llegada de la nueva dama de la corte, la chica del nombre extraño, la chica de la voz de sirena, la chica que cantaba como la aves... Así llego Céltica a la corte.




lunes, 15 de julio de 2013

Llegando a la corte


Va... ahí en camino al gran castillo, un hermoso carruaje fue por Céltica, Mérida y otras cuatro jóvenes aspirantes a tener un lugar en la corte. Va el carruaje por las hermosas calles de aquella aldea tan llena de vida, al fin la joven que vino desde muy lejos solo para encontrarse con un hombre al que no conoce, un hombre del que apenas tiene un vago recuerdo; espera que al estar en la corte al fin pueda tener una vida más libre de las lecciones que le impedían salir de aquella cabaña donde aprendió todo lo necesario para poder llegar a la corte, al fin puede comunicarse con las personas, puede leer y escribir, conoce la cultura, las tradiciones y a algunas personas, ya han pasado varios meses desde que salio de su lugar en el bosque; han pasado otros tantos desde que llego a la playa luego de un trágico accidente provocado por las sirenas, ha visto algunas tormentas, algunos días soleados; algunos momentos alegres y otros no tanto, ha extrañado en algunos momentos a su hogar... extraña la brisa y el canto del río, extraña el suspiro del viento, la humedad de la tierra y la vida mística que solía tener. 
¿Qué será lo que le espera en la corte?, ¿Encontrara a aquel hombre a quien busca?, ¿Lograra cumplir con lo que se ha prometido?
Al entrar en el palacio pudo admirar los enormes y maravillosos jardines que se extendían hasta donde su vista alcanzaba a observar, el palacio era una construcción gigantesca que parecía ser un laberinto, con costosos pisos de mármol  y hermosas piezas de arte, infinidad de piezas de ornamento de oro, plata y marfil, grandes ventanas con cortinas hechas de las más finas telas, hermosos techos adornados con pinturas y enormes candelabros que llenaban de luz cada habitación y ahí en el centro dos sillas tan grandes como armarios, eran los tronos del Rey y la Reina... ¿Podrá la Ninfa impresionar a la Reina con su hermosa voz?

jueves, 11 de julio de 2013

A unos días de ir a la corte

Ya en la cabaña, luego de un largo día por la aldea Céltica y Mérida se encontraban con el resto de las chicas que se preparan para ir a la corte o a alguna de las casas de los nobles, por meses la Ninfa que se ocultaba bajo la falsa piel de un ser humano había visto como muchas jóvenes se habían marchado y otras nuevas habían llegado a tomar lecciones de como comportarse como una dama, y así ser re-ubicadas en algún lugar en el que pudiesen encajar, algunas tuvieron éxito; otras... no tanto, algunas como sirvientas, otras como cantantes, costureras, bailarinas, mucamas, o simplemente como damas de compañía.
Al fin la chica rubia le dijo a aquella que había llegado del mar...
— Mañana te llevare por fin a la corte, para que la reina y el rey te escuchen cantar, probablemente logres ser la mejor cantante y desplaces a aquella que en este momento es la mejor, creo que te ira muy bien con su alteza real, ella es una mujer muy exigente, pero también esta llena de bondad...—, de vio interrumpida por la hermosa y delicada chica que tenía la voz cristalina.
— Pero, ¿Estaré sola en la corte?, ¿Tu vendrás conmigo?
— Claro que estere contigo, yo también soy dama de la corte, vengo a esta cabaña de vez en cuando para llevarle a la reina nuevas chicas con talento, vengo y las preparo para que no fallen en su intento por ganarse un lugar en la corte, algunas son elegidas por el rey y otras por la reina, yo prefiero que seáis elegida por la reina y no por el rey, ya que las que son elegidas por el rey, solo están para entretenerlo a él y eso no siempre es bueno.
La chica de los bosque sabía a que se refería su amiga, por su mente paso aquel centauro que la vigilaba constantemente desde las montañas de fuego, también recordó aquella ocasión en la que se encontró atrapada en el valle de los faunos, de como sus hermanas de fuego, tierra, agua y aire eran capturadas por esos machos con piernas de chivo solo para complacer sus mundanos deseos, recordó a aquel que intento manipularla para que se quedara con él y no fuera entregada a la Valkyria Humana... incluso pensó en otro seres de su mundo que tenían las misma características de machos brutos y bestiales como los tritones, los dioses y los minotauros, estos últimos los más crueles ya que después de satisfacer sus apetito sexual necesitan satisfacer su apetito alimenticio y se comen a su victima... son unas bestias infernales... los seres más nobles y con instinto más dulces son los Elfos y los Gnomos...
De pronto se pregunto si lo humanos se parecerían más a las bestias como los centauros o a los elfos... se pregunto si aquel hombre a que venia buscando sería personalidad noble o de carácter rígido y bruto como la mayoría de los machos a los que había conocido... Solo esperaba encontrarlo cuanto antes.

viernes, 5 de julio de 2013

Intriga: El hombre misterioso de la aldea

Va, va... camina por las calles en compañía de la dama que la rescato, camina por esas hermosas calles empedradas que visten a aquella aldea; preguntándose si sería el lugar correcto, si ahí encontraría a aquel caballero que hace ya unos meses vio por primera vez en el bosque, pensativa en si aquel caballero al que todos en su mundo llamaban bestia, a ese a quien no ha podido olvidar, a aquel demonio desdichado del que todos querían alejarla, insegura de si lo encontrara, insegura de si la reconocerá, insegura de lo que pasara una vez que se encuentre frente a él...
Victima de sus pensamientos, inmersa en la esencia de sus sueños va... la mujer hermosa y delicada a quien todo el mundo mira, desconcertada e interrumpida por una sensación que la invade por completo, busca de donde pudiera provenir ese extraño sentimiento, descubre que un hombre a lo lejos la miraba, la observaba como si tratara de vigilarla, ¿Quién era aquel hombre que parecía ser el depredador de aquella hermosa chica?... un tanto incomoda se pregunta si él conoce su verdadera identidad, lo vigila para mantenerse alerta, espera poder desaparecer de su vista, sabe que todos en la aldea la observan y hablan de ella en murmullos, pero ninguno la intriga, la asusta y la incomoda como aquel que parece estar interesado en ella... evidentemente no es a quien ella busca pero el si la mantiene bajo su ojo que frío y calculador parece intimidarla...
Va... buscando regresar a la pequeña chosa esperando ponerse a salvo de aquel que la vigila...

sábado, 29 de junio de 2013

En las afueras de la aldea


Tras el paso de algunos días Mérida llevo a su nueva amiga a recorrer las calles, tenían algunas cosas que hacer antes de que Céltica pudiera presentarse en la corte, pues era bien sabido en toda la comarca que la reina era muy exigente a la hora de elegir a sus damas de compañía, sin embargo; cuando el rey las elegía no solo era para que la reina tuviera mas damas, sino para que el pudiera satisfacer su placeres, y Mérida no estaba dispuesta a dejar que su compañera entrara a la corte por mandato del rey sino de la reina en persona.
Para Céltica todo era nuevo, desde los hermosos tejados hasta la gran variedad de cosas que había en aquel lugar: el mercado, los pozos, la iglesia y el palacio.
Ahí... Va... la hermosa chica que llego del bosque, la que fue encontrada en la playa, la que nadie conoce y a la que más de uno mira con extrañeza, no tiene la calidez del resto de las personas, pero es más hermosa que cualquier mujer que el sol de aquella aldea ha visto, va... ahí probándose telas inmensas para que el sastre confeccione hermosos vestidos para ella, conociendo de compras en el mercado, conociendo de fruta y de carne, conociendo la vida tan sedentaria de los humanos, viendo como estos se asfixian en su rutina, buscando en los burdos rostros de los hombres a aquel por quien tanto ha pasado, esperando reconocer a los demonios de aquel hombre que la habían arrastrado hasta esta aldea.... Maravillada por todo lo que su amiga humana le enseña en aquella aldea que parece la cosa más hermosa que la mujer del bosque ha visto, tan diferente del lugar de donde proviene, tan diferente de ella; espera con ansia la aparición de aquel misterioso hombre que desconoce y espera volver a ver... Ahí va la delicada extraña de la aldea, la chica de la que muchos ya han comenzado a hablar...

domingo, 5 de mayo de 2013

Céltica: Una nueva imagen para la Ninfa

Las clases comenzaron en aquella pequeña cabaña donde la Ninfa ahora se encontraba, con una apariencia distinta, una apariencia de la que nadie parecía reconocerle, ni ella misma podía hacerlo... algunas veces cuando pasaba junto al espejo se sorprendía o incluso se asustaba pensando que alguien la había descubierto... Ahora su piel era de un tono más blanco y claro debido a la poción que mística le dio hacia unas semanas atrás, ahora vestía prendas de hermosa seda con las que ella se sentía incomoda, pues no estaba acostumbrada a usar otra cosa que no fuera a base de agua y aire.
Mérida que era su nueva amiga, le enseño todo lo que pudo, le enseño a hablar, a escribir, a comportarse como una dama y también le enseño otras artes, la Ninfa aprendió danza, pintura y literatura; pero para sus compañeras nada era más hermoso que su prestigiosa voz, todos se preguntaban como era posible que una mujer tan delicada pudiera tener una voz tan potente y al mismo tiempo tan frágil, simplemente era maravillosa...
Pasaron pocos meses antes de que ella pudiera expresarse con toda fluidez a través del habla y aunque aprendió el lenguaje musical que se usaba en la aldea, ella siempre prefirió cantar en su propia lengua. Por fin Mérida pudo entenderse con ella y comenzó a preguntar todo lo que le intrigaba a esa chica: 
—¿Cuál es tu nombre?
— Céltica. —respondió la hermosa chica
— Es un nombre extraño aunque hermoso y único... y de ¿dónde vienes?
— Del norte. —dijo la Ninfa sin saber el nombre de las ciudades 
— Esa lengua que hablas de ¿dónde proviene?, jamas la he escuchado —dijo Mérida algo intrigada
— Es una lengua muy antigua que solo se habla donde nací, la verdad es que no recuerdo muchas cosas, he viajado por mucho lugares y el accidente del barco también me bloqueo un poco —replico la Ninfa esperando no ser descubierta.
— Bueno no te preocupes, ya recordaras —dijo la chica de cabellos dorados —mientras tanto aun tienes que aprender algunas cosas antes de ir a la corte, así que en unos días saldremos al pueblo, por ahora debes descansar 
Céltica se sintió dichosa de saber que al fin saldría de aquella casa, pues había posibilidades de encontrarse con el hombre al que buscaba.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Mérida

Despertaba la chica que fue encontrada en la playa, parecía que habían pasado días desde que las sirenas intentaron matarla, en realidad solo habían paso un par de horas, descubrió que la herida de su pie provocada por las aguas saladas había desaparecido por completo, sabía que se la habían lavado con agua dulce, lo que la sano de inmediato aunque le preocupaba que las personas que la ayudaron pudieran sospechar los orígenes de su naturaleza.
Aquel lugar en el que ella se encontraba no le parecía nada familiar, era como estar encerrada en una especie de mazmorra, estaba hecha de rocas ensambladas y dentro había un sin fin de cosas que no le eran familiares, o al menos no como ella las conocía pues si distinguió distintos tipos de madera: arce, pino, sauce... todos con diferentes formas, se dio cuenta que descansaba sobre un material extraño que era suave como el algodón pero era enorme, y vio que justo enfrente de aquel cobijo una especie de lago vertical en el que veía su nuevo reflejo; todo era muy extraño para ella.
Momentos más tarde una hermosa mujer entro a la habitación, tenia el cabello dorado como el sol, y vestía un hermoso vestido blanco, su ojos eran azules como el océano y su piel era clara y suave como la seda, ademas adornaba su cabello con piedras preciosas de distintos colores, usaba otro par de esas bonitas piedras en colgando de las orejas y otras adornaban delicada y elegantemente su cuello, aquella mujer le sonrió y le dijo algo que ella no puedo entender:
"¿Te encuentras bien?", pregunto la desconocida a su visita inesperada, pero está no respondió, y la mujer volvió  preguntar, pero lo único que recibió por respuesta fue un sonido extraño que ella no entendió; no estaba segura de si eso era una palabra o no y dijo "No hablas mi idioma ¿Cierto?, bien soy Mérida una dama de la corte del rey y pertenezco a la casa de la reina, supongo que tu necesitas aprender algunas cosas y tal vez así puedas entrar a la corte también, veamos ¿Tienes algún talento?", pero la chica que fue encontrada en la playa no respondió, la mujer tomo un pincel y le mostró una pintura diciendo al mismo tiempo que balanceaba el pincel, "¿Pintas?", la hermosa y frágil chica tomo el pincel y lo único que logro fue hacer unas grotescas manchas, "No" respondió la mujer, pidió a una des sus compañeras que tocara la flauta y a su vez tomo la mano de la delicada criatura y dijo "entonces bailas", trato de hacerla bailar pero lo único que consiguió fue hacerla tropezar "Tampoco" menciono la damisela, "probablemente tejas" y dándole una aguja e hilo la observo llegando a la conclusión de que ese tampoco era su talento ni su oficio, ya que se pincho muchas veces los dedos, "Tal vez poesía" pero la hermosa dama no puedo leer ni una sola letra de aquel libro que le otorgaron. Después de unos momentos la delicada mujer que provenía de la aguas escucho un delicado sonido que parecía provenir de la habitación continua, ella se asomo para ver que otra de las damiselas cantaba una bella canción. Una vez que esta hubo terminado se acerco a aquel instrumento de magnifico sonido le hizo una seña al joven que lo tocaba como si quisiera que volviera a hacerlo, esté que extrañado por aquella joven entendió el mensaje volvió a tocar, y ella con esa hermosa voz cristalina como el agua interpreto magníficamente una canción que estaba en una legua completamente extraña para todo ellos.
"¡Cantas!" exclamo la doncella, "bueno tenemos mucho que trabajar ya que no hablas nuestro idioma y por lo visto, no lees ni escribes así que tenemos que hacernos entender, ven conmigo que yo te ayudare para que seas una dama digna de ir a la corte"... La Ninfa no entendía nada de lo que esta mujer le decía pero sentía que podía confiar en ella antes de encontrarse con la persona que vino a buscar.

jueves, 25 de abril de 2013

La Mujer de la Playa

La tormenta había pasado, los cielos se veían despejados y las aguas del mar se sentían en calma.
Ella caminaba junto a la orilla del inmenso océano, con la mirada perdida en las tranquilas aguas que cantaban con cada ola que golpeaba suavemente la arena de aquella costa, vestía un hermoso vestido lleno de olanes, y un delicado pañuelo de seda sobre la cabeza que cubría magníficamente sus dorados cabellos, cual rayos de sol; aquella hermosa doncella caminaba serena y calmada...
Miraba hacía el horizonte donde parece que el cielo y el mar se unen, escuchando al susurro del viento sin saber lo que esté decía, caminaba cerca del mar cuando algo en el extremo de la costa llamo su atención, parecía una enorme túnica color azul; ella que curiosa paseaba, se acerco más para poder distinguir lo que ahí se encontraba. 
Una hermosa y delicada mujer yacía entre la inmensa cortina azul, sus cabellos negros enmarañados cubrían su pálido rostro, parecía ser una mujer que viajaba a bordo del barco que se hundió en la tormenta que acababa de pasar, estaba descalza y en uno de sus pies parecía tener una herida grave...
Aquella mujer que paseaba en la playa llamó a unos hombres que estaban ahí cerca para que la ayudaran a llevarla hasta su casa, estaba segura de que aquella mujer que parecía haber sido arrastrada por la marea aun seguía con vida y tenía que ayudarla...